Nuestra misión es la de realizar el proyecto de Dios en los ambientes en los que vivimos.Leemos los signos de los tiempos y estamos atentas a las necesidades que van surgiendo en nuestra sociedad para buscar, junto a las demás, respuestas adecuadas y nuevos caminos de discernimiento y de acción.
Allí donde las las necesidades son más urgentes queremos llevar a Cristo con una presencia testimoniante, con una capacidad de escucha, de ternura, de comprensión. Miramos al mundo con amor y optimismo, estamos abiertas para acoger los auténticos valores propios de la realidad humana, creamos comunión y diálogo para crear una sociedad basada en la justicia y en el respeto a la dignidad de la persona.
El trabajo, hecho con competencia y profesionalidad nos permitte:
- Construir un mundo más humano inspirado en los valores cristianos
- Valorar la persona más que la ganancia
- Colaborar con la obra de Dios en el mundo.
Algunas entre nosotras eligen vivir en zonas de misión, contribuyendo con la propia capacitación profesional o interviniendo en proyectos de desarrollo humano
Miembros a nivel mundial
Lo componen 173 grupos y sub-grupos
Consagradas perpetuas: 975
Consagradas temporales: 232, que conforman un total de 1.207 consagradas.
Lugares donde están presentes
América: Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, Republica Dominicana, Uruguay, Estados Unidos, Venezuela.
Asia: China Filipinas, Japón, India, Corea, Tailandia, Vietnam.
Europa: Bélgica, Francia, Alemania, Italia, Lituania, malta, Polonia, Portugal, República Checa, Rusia, Eslovenia Norte, Eslovenia Sur, Eslovenia, España, Hungría, Reino Unido.
Africa: Etiopía, Congo, Madagascar, Togo. Australia.
En Perú son 40 Voluntarias de Don Bosco
VOLUNTARIOS CON DON BOSCO Los Voluntarios somos laicos consagrados salesianos. Laicos conscientes de nuestra propia consagración bautismal que, para responder a una llamada especial, radicalizamos la consagración, por medio de la profesión de los consejos evangélicos y nos comprometemos a vivir, como Cristo, un amor casto, pobre y obediente. Vivimos la vocación de seculares consagrados en el espíritu salesiano de Don Bosco.
En la Iglesia somos un Instituto Secular masculino compuesto por fieles laicos, llamados por el Espíritu Santo a seguir a Cristo en la Secularidad Consagrada Salesiana.
Asumimos la profesión de los Consejos Evangélicos de castidad, pobreza y obediencia para tender a la perfección de la caridad al estilo de Don Bosco sin habitar en una casa religiosa y formarse en un seminario, sino desde nuestra propia situación de laicos en el mundo.
Somos laicos que Dios consagra en la Iglesia para el mundo, no olvidamos ni el mundo por Dios, ni a Dios por el mundo.
Nos comprometemos a vivir los consejos evangélicos para vivir como Cristo, un amor casto, pobre y obediente, testimoniando así una libertad donada de total entrega al Reino según la espiritualidad salesiana, no nos identifica ningún signo externo.